
El calentamiento global se define como el aumento de la temperatura media de la atmósfera terrestre y del agua del mar. En cualquier caso, un calentamiento (aunque sea de pocos grados) implica a corto plazo unos efectos no deseados y de alcance global como los que se citan a continuación:
-El dehielo de los casquetes polares, con el consiguiente incremento del nivel del mar y las inundaciones de las zonas costeras, que además suelen ser las áreas más productivas y densamente pobladas de todo el planeta.
-Otro factor a considerar estriba en el deshielo del permafrost (el suelo congelado de la tundra) ya que durante su calentamiento se libera a la atmósfera grandes cantidades de metano.
-La aparición de enfermedades tropicales fuera de lo que sería su área típica de influencia.
-La muerte de muchas especies de fitoplancton debido al incremento de la temperatura del agua del mar y las consecuencias de ello supondría sobre el resto de la cadena trófica.
-El calentamiento de las masas oceánicas provoca cambios en la intensidad y en la frecuencia de los episodios de huracanes, ciclones y tormentas tropicales. Según estudios, el aumento en unos grados de la temperatura del agua de mar provoca diferencias en la velocidad del viento en las capas inferiores y superiores de la atmósfera, y según los medelos climáticos, se espera que la diferencia entre ambas temperaturas crezca en el oceáno Atlántico y disminuya en el pacífico: el resultado es un descenso en el número de huracanes en el Atlántico y un incremento en el Pacífico.

Las emisiones de las industrias y el tráfico urbano contaminan y hacen irrespirable el aire de muchas ciudades, poniendo en peligro la salud humana y de muchas otras especies.
Las centrales nucleares vierten continuamente a la atmósfera humos que contribuyen a empeorar el efecto invernadero. El peligro de que el efecto invernadero provoque la descongelación de grandes masas de hielo de los casquetes polares es, hoy en día, muy real.Científicos de todo el mundo controlan la estabilidad de los glaciares.
¿Sabías que hay toneladas de basura espacial dando vueltas a la Tierra?
Desde 1957, se han puesto en órbita más de cinco mil aparatos, los cuales, tras su misión, son abandonados en una de las órbitas cementerio.
Concretamente, sólo en la órbita geoestacionaria, a 36 km de la Tierra, se calcula que hay unos tres mil fragmentos, de entre 15 y 100 cm, dando vueltas a una velocidad de vértigo. El guante que en 1965 perdió un astronauta estuvo viajando a 28 000 km/hora, hasta que se desintegró al contactar con la atmósfera.
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